Derechos del no nato

Tales de Mileto dijo “el agua es el principio de todas las cosas”. Hoy, leyendo un artículo publicado en el periódico el País titulado "Queremos que nuestro hijo sea sordo" me da la impresión que a estos les mezclaron algo en la suya, sino...

Al parecer, la pareja británica formada por Tomato y Paula Lichy tuvieron un hijo que nació sordo como ellos. Este hecho lo celebraron con gran alegría porque: "Ser sordo no significa una discapacidad o ser médicamente incompleto, significa formar parte de una minoría lingüística, dijeron.

No quiero capcioso y dejar la frase aquí porque, Tomato añadió "Estamos orgullosos, no del aspecto médico de la sordera, sino del lenguaje que utilizamos en la comunidad en que vivimos".

Llegado a este punto uno puede estar de acuerdo o discrepar, argumentando las dificultades sociales que esta “característica personal” implica. De todas formas poco hay que hacer en este caso dado que la naturaleza tomo de antemano una decisión. Para mi, el problema radica en la determinación, ya no de tener un segundo hijo, sino de tenerlo in Vitro (ella ha cumplido ya los 40 años) y aprovechar esta circunstancia para seleccionar genéticamente los embriones que aseguren que su segundo hijo sea incapaz de oír.

No se vosotros pero, hay cosas que no alcanzo a entender por mucho que me lo propongo. Mientras que desde el ámbito de la medicina se está estudiando los implantes cocleares y otras prótesis auditivas, hay quien escoge la sordera como “pan bajo el brazo” para su futuro hijo.

Y no sé que puede opinar un jurista de esto pero, ¿que me decís de la posibilidad de que este niño (no nato), pueda llevar dentro de unos años a sus padres ante los tribunales, a causa de la imposición de una minusvalía no deseada para el?.

Aquí lo dejo, si controvertido es el tema de la elección de genes en embriones para poder salvar a un hijo gravemente enfermo, cuan controvertido será este tipo de propuestas…