20/12/07

Regreso del aeropuerto


Por mis convicciones, mi formación y mi trabajo soy muy respetuoso con todo aquello que tiene que ver con la seguridad. Por eso, el pasado lunes día 10, acepté sin rechistar que el avión no saliera de Barcelona con rumbo a Praga a las 07:10, ni a las 08:10, ni tampoco a las 09:10. Acepté que el avión estaba siendo inspeccionado por la Guardia Civil, por motivos de seguridad.

A las doce, aún con los problemas de seguridad sin resolver, anunciaban que el comandante había finalizado sus horas de vuelo, con lo cual el vuelo quedaba anulado…

Por mis convicciones, mi formación y mi trabajo soy muy respetuoso con todo aquello que tiene que ver con la seguridad. Por eso, el pasado lunes día 10, no aceptaba de buen grado cuando mi mujer me contaba que había tenido un accidente casero. Me explicaba que después de la ducha mientras se estaba limpiando el oído con un hisopo, por aquellas cosas de la vida resbalo, se dio un golpe en el codo contra la pared y se introdujo el palito hasta adentro provocándole un gran dolor.

A las doce, mientras el comandante había finalizado sus horas de vuelo y no podía seguir volando, el doctor del servicio médico del Aeropuerto Internacional de Barcelona, diagnosticaba rotura de tímpano a mi esposa, diagnóstico que fue confirmado más tarde por el servicio de otorrinolaringología del Hospital del Valle de Hebrón de Barcelona. Entre las observaciones médicas, había una que decía: prohibido volar en dos meses.

Y yo queriendo ir a Praga, país donde Kafka describió las ansiedades y la alineación del hombre del siglo XX, se quedó sin ver las del siglo XXI…

Por seguridad uno se ha de quitar los zapatos, la cartera, las llaves y las monedas al pasar por el arco detector de metales. Por seguridad uno ha de esperar si hacen una inspección al avión. Pero os digo con la voz en alto que por vuestra seguridad no os pongáis palitos en el oído, porque por inseguridad podéis quedaros sin algo tan preciado como vuestro oído… o vuestro viaje a Praga…

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Una historia digna de estar en mi blog XD.

Siento mucho que no pudierais hacer el viaje y espero que tu mujer se recupere pronto de ese oído.

Un abrazo compañero

Josep Lluís dijo...

Gracias Jefe, y he obviado cosas realmente horripilantes. Imagina después de siete horas de espera frente la puerta de acceso núm. 45, una de las azafatas de tierra discutía por teléfono porque no había desayunado... que terrible por Dios...

Grupo Leyendas Urbanas Blog dijo...

Dios mio una azafata con hambre, pa´mearse de miedo

Josep Lluís dijo...

menos mal que era de tierra jefe, de ser de vuelo: pa'abernos matao!

mpiryko dijo...

¡Por Dios! ¡Usa el preservativo!
¡Por favor! ¡No moleste!
¡Por su salud! ¡No fume!
¡Por higiene! ¡No haga eso!
¡Por seguridad!¡Estese quieto!
No sé donde vamos a llegar, seguramente a ninguna parte, pero habremos dado un ... ¡buen rodeo!
8-p
¡Salud, majo!
Nota: Lamento lo de Praga y su señora, que espero no sea grave.

Anónimo dijo...

vaya, y yo que esperaba tus comentarios acerca de la capital de la Republica Checa para saber a que atenerme ....

por lo pronto una semana antes de que haga planes de viaje pienso quemar todos los bastoncillos de oidos que hay en casa... que hay muchos

Josep Lluís dijo...

Uberum dame tiempo. Praga es una asignatura pendiente y en este año iremos sin falta . Si hago el viaje antes que vosotros te cuento sino, será cosa tuya. Tengo mucha información pero claro, ahora es solo teoria.Por favor si, los palitos dos meses antes a la basura.

Unknown dijo...

Jajajaja! Menos mal que tu mujer te dijo lo que le había pasado o lo hubiese pasado fatal durente el vuelo... Voy a intentar adivinar dónde vas este año pero lo has puesto más que difícil.
I ara a fer dentetes: quina llàstima! AMb lo bonic que és Praga!!!