¿Por qué bostezamos?
El bostezo es un mecanismo natural de aviso que se pone en marcha cuando el organismo necesita reposo o cambio de actividad. Se produce de manera involuntaria, tanto en el hombre como en los animales, y simplemente para indicar que hay necesidad de reponerse mediante el descanso.
El sistema nervioso recibe información del cansancio o del aburrimiento que está provocando una disminución de la atención, pérdida de concentración, laxitud muscular, etc. Es en este momento cuando entra en juego el sistema nervioso autónomo, responsable de que, de golpe, los ojos se cierren la boca se abra al máximo, al tiempo que se inspira profundamente. Después se produce una pausa en el proceso respiratorio, conocida como apnea, a la que sigue una aspiración de aire. Esta puede ir acompañada de un ruido característico que, en ocasiones, resulta incontrolable.
¿Por qué tenemos hipo?
En la producción del proceso fisiológico del hipo interviene sobre todo, el diafragma, el músculo que separa la cavidad abdominal de la torácica a manera de tabique y participa directamente en los movimientos respiratorios. Así, al contraerse, hace que el esternón se levante y sea posible la inspiración. En la expiración sucede lo inverso.
En ocasiones, los músculos abdominales hacen una presión excesiva sobre el diafragma por ejemplo, tras comer o beber en exceso, o después de inhalar humo, lo cual hace que se distienda de forma anormal. Esto comporta que la frecuencia y profundidad de la respiración se altere, sucediéndose una serie de contracciones espasmodicas de la membrana muscular, que provocan inspiraciones incompletas i interrumpidas.
Esto es el hipo: el gran aumento de la presión del aire en los pulmones, producido por las convulsiones del diafragma. El cierre de la glotis que las acompaña es el causante del sonido gutural característico del hipo y de la potencia de estos. Así pues cualquier trastorno que irrite el diafragma o los nervios que lo inervan provocará el hipo. En ocasiones, este movimiento compulsivo del hipo está relacionado con una enfermedad: un ataque de corazón, una neumonía crónica, un embarazo en el que el útero presiona el diafragma, una lesión en el área del cerebro dónde esta situado el centro del hipo
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